Flashback 44
Para los amantes del séptimo arte ver como en tu ciudad desaparecen las
salas de cine es una pésima noticia. En Igualada el Mundial programo para su
cierre la proyección de una película de Manolo Escobar y El hijo de Atila; el
Astoria no sobrevivió al incendio que sufrió un dia laborable; otros como el
Salón Rosa aguanto muchos años y el Kursal fue el último en abrir y en cerrar.
La ciudad se quedó huérfana hasta que la Ateneu Igualadí decidió liberarnos de
esa orfandad.