El pasado domingo asistí en el pueblo de Argençola al “Mercat de les espècies, productes i artesania” el segundo que organiza la Associació Cultural El Trill. El mercado era una buena ocasión para ejercitar los sentidos y poner a prueba cuales son nuestros conocimientos de las especies y aromas que nos acompañan desde la prehistoria aunque a veces sean grandes desconocidas.
Me encontre con buenos amigos como Joan Carol del restaurante “8 cadires d’Igualada”, invitado como miembro del jurado en el concurso de sal aromatizada; escucharle hablar con tan entusiasmo y pasión de su especial restaurante fue muy gratificante y el hecho de que tenga hasta final de año todo reservado, me confirmo que las iniciativas nuevas, innovadoras, creativas… son aplicables a cualquier projecto sea cual sea su base y enfocarlos debidamente es básico.