La idea de recopilar escenarios, que he fotografiado a lo largo de los años, donde el escritor Carlos Ruiz Zafón situa a los personajes de la saga “El Cementerio de los Libros Olvidados” y construir con ellos una serie, una serie, en la que aventuro que no tardareis más de 55 SEGUNDOS en reconocer que la mayoría de las imágenes han sido tomados en la ciudad de Barcelona, tomó forma en mi cabeza mientras Teresa me explicaba, suele hacerlo mientras desayunamos, uno de los cuatro libros de la saga que estaba leyendo.
La novena imagen que incorporo a esta serie fotográfica sobre “El Cementerio de los Libros Olvidados” corresponde al Círculo Ecuestre. Este palacete modernista, proyectado en 1910 por el arquitecto Joan Hervàs, que desde 1950 es la sede del, Círculo Ecuestre, club empresarial privado, de carácter exclusivo al que suelen pertenecer las personalidades más influyentes de la sociedad civil catalana.
“La llamada Casa Pérez Samanillo llevaba ocupando por espacio de medio siglo el chaflán de Balmes y Diagonal a modo de espejismos (…) sus trazas de arrecife parisino iluminando de cobre las calles desde sus ventanales y exhibiendo a los mortales sus escalinatas, salones y arañas de cristal (…) Hacía años que aquel opulento fósil había pasado a ser la sede del Círculo Ecuestre de Barcelona, una de las inexpugnables y elegantes instituciones que fermentan en toda gran urbe (…) Alicia se acomodó en la butaca enfrentada a Barceló y saboreó el aire aristocrático y excluyente que destilaba el decorado. (…) Alicia extrajo de su bolso el ejemplar de “Ariadna y el Príncipe Escarlata” envuelto en un pañuelo de seda y se lo ofreció. Barceló lo tomó con ambas manos y tan pronto como sus dedos rozaron la cubierta se le iluminaron los ojos y una sonrisa de gozo se esparció en sus labios”. Capítulo VIII, LA CIUDAD DE LOS ESPEJOS. Barcelona. Diciembre de 1959. Cuarto libro.
* Fotografia tomada en 1989. Colección privada.