Por decisión propia nunca me he especializado en una determinada línea fotográfica. Me gusta experimentar, afrontar situaciones nuevas y asumir algo de riesgo en una sesión fotográfica, pues me parece muy estimulante y si uno domina la técnica, sabe rodearse de un buen equipo de colaboradores, los resultados suelen ser plenamente satisfactorios, doy fe de ello.
La disparé hace 12.350 días y ella junto a otros originales fotográficos más fueron la base sobre la que se cimentó la campaña publicitaria en prensa, catálogo y puntos de venta de “MALGAR COMPANY” una empresa catalana distribuidora de complementos masculinos.
Debo decir que cuando me llamaron mi primer impulso fuer decirles que no, ya que en honor a la verdad aunque me gusta extraordinariamente experimentar no soy “hombre de bodegones” fotográficamente hablando.
El cliente insistió. Me comentó que mis referencias eran extraordinarias y que él no deseaba unos bodegones al uso de sus productos, ya que para eso ya tenia fotógrafo. Nos reunimos, hablamos y acordamos que le presentaría una propuesta y un presupuesto.
La referencia al presupuesto no está vinculada a que quizás mis honorarios fueran más elevados que los de su fotógrafo habitual, sino a que para las sesiones fotográficas precisaría de un modelo masculino y una estilista.
La propuesta les entusiasmó, el presupuesto les asusto un poco, salir de la zona de confort siempre incomoda un poco, pero ellos aceptaron y nosotros nos pusimos a prepararlo todo. Como modelo seleccionamos a Thomas Rosch y como estilista a Tona Coromina, la mejor para ese tipo de sesiones fotográficas.
Trabajamos en mi estudio de Gran Via de Barcelona. Éste fue tomado literalmente por miles de complementos masculinos, complementos con los que Thomas interactuaba magistralmente.
Se trataba de dar una imagen del producto y complementos masculinos, muy diversos, vinculados a situaciones cotidianas en las que un hombre puede hacer uso de ellos destacando la diversidad y presentación de los mismos.
Para ello decidí envolver la presencia del modelo con cantidad de productos para cada línea, con un acting desenfadado, divertido, inusual, que se acompañaba de un estilismo en la vestimenta del modelo que hacía referencia a cada línea ya fuera de complementos, cosmética, regalo, fiesta, underwear … en definitiva que “Malgar Company” era una empresa global en todo tipo de complementos masculinos con presentaciones muy bien cuidadas.
Debido a la estética de las imágenes que podían ir desde plano general a primeros planos, busqué una iluminación fresca con fondo blanco y sin apenas sombras que me facilitaba el Hazyligth de Broncolor. Disparé con Ektachrome 100 Asa, con la Hasselblad 500 ELX y distintas ópticas en función del encuadre de cada original. Debo añadir que en esta sesión nos lo pasamos muy bien a pesar de la cantidad de originales fotográficos que hicimos, pues logramos crear un magnifico ambiente, que siempre favorece en los resultados.