No siempre me he ilusionado con algunas propuestas profesionales a primera instancia, pero una vez aceptadas pongo a su servicio todos mis conocimientos técnicos y creativos, ya que no sé trabajar de otra forma, y creo que no debe hacerse de otra manera.
La disparé hace 10.570 días y ella fue la imagen de la campaña de publicidad para “Looky” diseñada por la agencia DENADA de Barcelona. Creo recordar que era la tercera o cuarta campaña de publicidad que realizaba para “Looky”, pero en esta ocasión el director creativo no era Núria Vilaseca como en las anteriores, ya que una nueva agencia era la responsable de la cuenta. No siempre es bueno que el cliente (Looky) exija a la agencia de publicidad que trabaje con uno u otro fotógrafo, pero debo reconocer que a pesar de mis recelos la sesión fue bien.
Me explicaron que la base de la nueva colección de zapatos se sustentaba en la confortabilidad, suavidad, ligereza… de los mismos y que ese era el objetivo que debíamos asumir. Analizamos varias opciones y nos decantamos de mutuo acuerdo en que trabajaríamos con dos modelos, ya que así en una misma imagen teníamos el doble de producto; la estilista, Tona Coromina, las vestiría con ropas vaporosa, ligeras, volátiles.., pues así acentuábamos la ligereza y suavidad de los zapatos; el acting de las modelos sería el de bajar unas escaleras en la calle y a la vez daríamos a la imagen un efecto de movimiento que reforzará la idea de que con cualquier zapato de la nueva colección era comodísimo andar y por último aplicaríamos –una de las pautas más recurrentes en las fotografías publicitarias de zapatos- encuadraríamos por debajo de la rodilla.
Las campañas de primavera acostumbran a realizarse en invierno por lo tanto los días acostumbran a ser fríos y grises, con temperaturas de color elevadas en las tomas de calle. En este caso quería obtener una tonalidad de color muy especial en las diapositivas, para ello jugué con el apoyo de dos fluorescentes industriales y dos proyectores Cremer que añadirían un tono cálido en la piel de las piernas y mantendrían el tono plateado de los zapatos.
Con el movimiento que generan las piernas al descender por unas escaleras urbanas, ajusté la obturación de la Nikon para que en partes de la imagen se reflejara un sutil movimiento y los zapatos no perdiesen sus características de suavidad, ligereza y look de moda. A partir de estas premisas sólo quedaba coordinar el movimiento de las dos modelos que descendían al unísono en pequeñas tomas, para que entre ellas se pudiesen recuperar del intenso frío invernal que nos acompañó en toda la sesión.