divendres, 27 de gener del 2023
162è Tallicó d’Igualada
dimecres, 25 de gener del 2023
La disparé hace 11.165 días
Las complicidades con los directores de arte, creativos, ejecutivos… de las agencias de publicidad son positivas, efectivas, beneficiosas…, pero no hay que tener miedo en discutir con ellos posibles planteamientos (fotográficos) erróneos que nos sugieran, ya que –no podemos olvidar- que quien tendrá que resolverlos in situ seremos nosotros. No nací con esa obviedad aprendida lo hice a lo largo de los años.
La disparé hace 11.165 días y ella fue la imagen de la campaña publicitaria de la marca de cosmética SENSILIS, nacida en Barcelona en el 1979 en un laboratorio farmacéutico, que hoy en día sigue contando con todo el respaldo científico en dermocosmética avalado por la certificación ISO y la satisfacción de sus clientes.
En mi primera reunión con el director creativo David Caballero, al que conocía bien, ya que habíamos colaborado en anteriores ocasiones, pero con otras agencias publicitarias, éste (David) me explicó cuales eran los objetivos de la campaña y estuvimos debatiendo algunas ideas. De entre todo lo planteado le pareció bien que nos centráramos en una de mis propuestas y acordamos que presentara un presupuesto en base a ella.
Con Teresa nos pareció oportuno, ya que era la primera vez que colaborábamos con Sensilis (el cliente) y Alta Definición (la agencia de publicidad) presentar una propuesta completa y por eso a nuestro presupuesto adjuntamos el de nuestros colaboradores y el de la modelo. La estilista sería Rosa M. Gimeno; el peluquero - maquillador Lluís Coca; la modelo; mi asistente de fotografía David Pla y Teresa Jové la directora de producción. Convocamos una reunión y en ella les presentamos muy detalladamente nuestra propuesta. Aprobada ésta yo me centré en la parte más técnica, ya que en ella sustentaba el 90% del éxito.
Quería trabajar con una luz suave, envolvente, que acariciase la piel y decidí trabajar con fluorescencia, en aquella época era difícil encontrar tubos fluorescentes con la temperatura de color corregida a 5.500 ºKelvin con lo que tuve que realizar algún test de filtrado de la luz, para corregir las dominantes que no favorecían a la piel. También mandé construir dos grandes soportes blancos con una curvatura a 90º para situar a la modelo en su centro, ya que iluminé el set desde atrás para conseguir una difusión de la luz indirecta y extra suave.
Trabajé a través de una pequeña rendija entra las dos pantallas curvas con la Hasselblad 500 C con una óptica de 110 mm. y film Ektachrome de 100 Asa. En los test de iluminación también realicé pruebas con la tonalidad del fondo con tonos pastel fríos y calientes con Teresa Jové, que siempre estaba dispuesta a darme una mano. Esto sí durante la sesión el equipo de once personas que asistía a las tomas fotográficas, apenas vieron nada por la pequeña rendija abierta entre las dos pantallas curvas y tanto la agencia como el cliente depositaron toda la confianza en mi criterio fotográfico.
divendres, 20 de gener del 2023
161è Tallicó d’Igualada
divendres, 13 de gener del 2023
160è Tallicó d’Igualada
dimecres, 11 de gener del 2023
La disparé hace 8.335 días
Sin la plena confianza del cliente para con el fotógrafo, a éste le es altamente difícil afrontar según que proyectos y, aun más, lograr objetivos satisfactorios.
La disparé hace 8.335 días y ella junto con una docena de imágenes más, formó parte de la campaña publicitaria de la colección Otoño-Invierno 2000-2001 de la empresa igualadina Escorpión.
La agencia de publicidad ABM era la que gestionaba la cuenta y Santi Anglada su director creativo. A lo largo de mi trayectoria profesional me he percatado que, a priori, es mucho más fácil fotografiar acciones que sensaciones, por eso cuando me explicaron que el leitmotif de la campaña se podía resumir en “Para ser tu misma, en cualquier día y en cualquier hora” supe que la cosa no iba ha ser plácida – aunque con Santi jamás lo era -.
Tras largas reuniones concluimos que trabajaríamos en Platós Barcelona, pues necesitaba de sus dimensiones para realizar los originales fotográficos que Santi me demandaba, ya que, como en otras ocasiones, rechazaba “montajes posteriores”.
El casting en una campaña de moda siempre es importante y decidimos que Mak, con la que ya habíamos trabajado en anteriores campañas, sería la más ideal, ya que encajaba perfectamente con el target de la colección. Confiamos el estilismo a Anna Valles; el maquillaje y peluquería a Babette Cruz; el asistente de fotografía fue Miguel Angel Romero, eléctricos de Zeferino y Teresa Jové la responsable de la producción fotográfica.
He de decir que los cuatro días de sesiones fotográficas fueron más que intensos, ya que trabajé al límite, se trataba de combinar proyecciones en el fondo de la imagen con la modelo interpuesta en la proyección de distintos elementos y que éstos se proyectaran a la vez sobre su cuerpo. En aquella época los proyectores de video tenían una potencia limitada y los propios aparatos, los más potentes, eran de dimensiones descomunales, la intensidad lumínica y la temperatura de color no era demasiado compatible con la iluminación del cuerpo de la modelo Mak Gilchrist. Para ello tenía que hacer verdaderos ejercicios posicionales entre la proyección del video, la posición de la modelo y su iluminación para compatibilizar ambas.
Trabajé con spots HMI matizados con filtros White difusión, Kinoflous para iluminar a la modelo, la separación de ella con el fondo filtrando y reservando la luz fluorescente mediante pantallas, para que ésta no invadiera la proyección del fondo ya que las intensidades lumínicas no coincidían, una vez equilibrado el set las sesiones continuaron los cuatro días, hasta que salió una prenda con un cuello de piel y aquí nos encallamos ya que Mak se negó a vestir una prenda que llevaba una mínima porción de piel animal y de nada sirvió decirle ni convencerla de que la piel era sintética.
Trabajé con la Hasselblad 201 F con óptica planar f 2 de 110 mm y film Ektachrome de 100 Asa, con lo que tenía que modificar constantemente la posición de luces y pantallas en cada imagen, para no tener que extremar la obturación y diafragma de la cámara dirigiendo a la modelo de forma precisa en su acting y ensayando sus movimientos. Las sesiones se crisparon entre cliente, director creativo y la modelo a partir de la negativa de posar con un cuello de piel, pero la profesionalidad entre modelo y fotógrafo no se vio afectada en el resto de originales de la campaña.
REPRODUCCIONES DEL CATÁLOGO