Cuando los valles y hondonadas se visten de niebla, cuando las bajas presiones nos permiten acariciar las nubes ha llegado el invierno.
Esta estación se caracteriza por días más cortos, noches más largas y temperaturas más bajas a medida que nos alejamos de ecuador. El hecho que la órbita de la Tierra sea elíptica, se traduce en una duración menor del invierno en el hemisferio norte.
Las estaciones son los periodos del año en los que las condiciones climáticas imperantes se mantienen, en una determinada región, dentro de un cierto rango. Existen cuatro métodos principales para dividir el año en estaciones:
El método astronómico o tradicional, que se basa en los acontecimientos astronómicos relacionados con la posición de la tierra respecto al sol.
El método meteorológico, que se basa en acontecimientos climáticos, sobre todo en la temperatura.
El método fenológico, que se basa en acontecimientos relacionados con los cambios en la naturaleza al pasar el tiempo (fauna y flora).
El método tradicional asiático/irlandés, basado en la insolación o radiación solar.